top of page
  • Facebook Social Icon

Director: Juanfer Andrés, Esteban Roel.

Reparto: Macarena Gómez, Nadia de Santiago, Hugo Silva, Luis Tosar.

Género: Terror. Thriller. Drama

Duración: 91 min.

Año: 2014.

Musarañas

Todo el peso de la película recae sobre Macarena Gómez. Había pasado años viéndola en su papel de Lola en “La que se avecina”, y para ser sincera nunca llamó especialmente mi atención. Hasta que llegó Musarañas. Macarena está soberbia. Su actuación no deja nada que desear. Atrapa a Montse y la hace completamente suya, dotándola de un realismo digno de admirar. Me explico. La película nos muestra algunas (bastantes) escenas un tanto truculentas. Al punto de que se nos antoja un tanto surrealista. Pero la actuación de Macarena Gómez nos hace creer que puede ser algo perfectamente factible. Algo que se agradece muchísimo y que nos encanta.

​

La relación de Montse y Nia (su hermana pequeña interpretada por Nadia de Santiago)  nos llama la atención desde el principio y es el pilar de la película (vemos a un Hugo Silva con un papel correcto, que cumple su función,pero que no va más allá), pero ya desde aquí es donde las cosas, viéndolas desde los criterios que usamos para calificar las películas, dejan de gustarnos.

​

Montse, desde el principio se nos muestra que es algo peculiar. Hasta aquí todo bien. Pero a medida que avanza la película, aparecen cada vez más facetas. Cada cual más estrambótica que la anterior. Desde el punto de vista de Mal@ de los Nervios (que es desde donde miramos ahora), no nos gusta Montse.

​

En un principio se nos dice que es agorafóbica, algo que podemos ver en las primeras escenas, pero se nos muestra como mucho más que eso. Vemos como Montse tiene un miedo irracional a ser abandonada por las personas que ama (Nia, en este caso), lo que le hace tener arranques de ira y agresividad. Este síntoma se corresponde, entre otros, con TLP (Trastorno Límite de la Personalidad), pero de ahí, a usar un torso humano como maniquí de costura, hay un abismo.

​

Montse no se corresponde en absoluto con la realidad. A medida que avanzamos, se nos va mostrando como una psicópata descontrolada que asesina a todo lo que cruza su puerta. Torturas aparte. No, no compartimos esta visión del enfermo mental, sea cual sea su enfermedad.

​

Pasamos desde una chica agorafóbica a una auténtica “serialkiller” a lo largo de 91 minutos. En algún punto de la película se ha perdido toda perspectiva hacia el enfermo mental y sus circunstancias.

​

En resumidas cuentas, la imagen que nos muestra la película del enfermo mental está total y absolutamente difuminada (en pos del film y su temática, tendremos que admitir).

​

No observamos una actitud paternalista hacia el enfermo mental, Montse en este caso, pero sí observamos una descarada e insana criminalización, que muy a nuestro pesar, no hace más que aumentar el estigma contra el que estamos luchando. Porque no, repudiamos la opinión casi generalizada de que el enfermo mental es alguien peligroso, capaz de cometer semejante baño de sangre de la noche a la mañana.

​

Por los aires que nos muestra la película, al ser un thriller de terror, no observamos una actitud de burla. Queremos pensar que la creación del personaje de Montse, es acorde al género del film, no porque se tenga esa visión tan irreal del enfermo mental.

​

Sin más no nos queda más remedio que dotar a Musarañas con el Sello Amarillo de Mal@ de los Nervios.

​

A pesar de todo, recomiendo que veáis la película para que podáis entender del todo de lo que arriba os hablo. Si sois aficionados a este género, estereotipos a parte, estoy segura de que la disfrutaréis.

​

Adaptaremos a Mal@ de los Nervios una frase de Stephen King: “Ve películas, muchas películas, aunque no se correspondan con tu visión del enfermo mental, al menos te enseñará cómo no debes pensar.”

​

Sin más hasta aquí la “crítica” de hoy. Volveremos en la próxima actualización con YES WE FUCK. ¡Hasta pronto!

¡Buenos días! Feliz lunes a todos.

 

Después del domingo de Carnaval ¡y de Oscars!, volvemos con las pilas cargadas para dejaros la crítica de la semana. Hoy hablaremos de Musarañas, de Alex de la Iglesia. Por si no la conocéis, os pongo un poco en situación y os dejo un trailer.

 

Montse es una costurera que ha pasado su vida cuidando de su hermana pequeña cuando su padre las abandonó al morir su madre. Aunque ella no lo sepa, rápidamente descubrimos que sufre de agorafobia, y que se pasa la vida en su lúgubre piso, en el Madrid de los años 50. El día a día de Montse, se ve rápidamente alterado cuando Carlos, su vecino de arriba, sufre un accidente frente a su puerta al huir de su futura paternidad. Montse sale en su auxilio, y como imaginareis si a estas alturas os ha dado por ver el trailer, aquí es donde todo empieza a ir de mal en peor.

​

Antes que nada, decir que esta crítica me genera un debate interno. A pesar de no ser especialmente fan de Alex de la Iglesia, Musarañas me maravilló desde el punto de vista cinematográfico. Ahora, os adelanto que en nuestra sección no se va a llevar buena nota, por lo obvio. Sin más empezamos.

​

Esta película supone el debut de ambos directores, a cargo por primera vez de un largometraje. Bravo. Sin más. Un trabajo inmaculado. Rápidamente entramos en el pequeño mundo de Montse y nos sentimos tan confinados como ella. Con un estilo visual grotescamente bello, el film nos atrapa hasta el final. Inconscientemente nos hemos encariñado de Montse (a pesar de todo lo que hemos visto y nos falta por ver), y nos alegramos cuando da esos pequeños pasos más allá de las puerta de su casa o cuando no le pillan los cadáveres que esconde en su sala de costura. Bueno, quizá de esto no tanto, pero el caso es que queremos que Monte esté bien. Y deje de matar, y esas cosas.

​

Diremos que el punto fuerte del film se encuentra en sus personajes y en su final (que no revelaremos, podéis seguir leyendo con tranquilidad), que nos hace ver la película desde un prisma totalmente desconocido hasta ahora.

​

bottom of page